Los retos de la profesión enfermeras y su papel en la sostenibilidad del sistema sanitario, a debate
Durante los próximos 22 y 23 de octubre se celebrará en Alicante la I Edición de las Jornadas Nacionales de Enfermería sobre gestión y cuidados
Muchos son los retos que el sistema de salud debe afrontar. Uno de los más complejos es, sin duda, el ajuste del papel de sus profesionales en una realidad cambiante como consecuencia de la evolución de las necesidades de los pacientes. Los profesionales demandan mayores competencias como poder recetar, un reconocimiento creciente de las especializaciones, entre otras cuestiones.
Recientemente ha sido aprobado el texto que permitirá en breve la publicación del R.D. que regule la prescripción enfermera. Este acuerdo se ha alcanzado en la última reunión celebrada el pasado 15 de septiembre.
En Andalucía ya existe un decreto que reguló en 2009 estos aspectos estableciendo la orden enfermera de dispensación. Además de contribuir al desarrollo profesional de esta disciplina, potenciando competencias clave, ha supuesto una apuesta muy importante en términos de sostenibilidad del sistema, mejorando la eficiencia en todos sus aspectos. Otra mejora importante ha sido la de la accesibilidad de la ciudadanía, especialmente en grupos de crónicos, disminuyendo la frecuentación de los centros y mejorando la gestión de la demanda entre profesionales ya que permite efectuar consultas de alta resolución, evitando consultas sucesivas.
Con este panorama cambiante, la Fundación Economía y Salud junto con la Asociación Nacional de Directivos de Enfermería (ANDE), el Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (CECOVA), el Colegio Oficial de Enfermería de Alicante, el Grupo nacional para el estudio y Asesoramiento en Úlceras por Presión y Heridas Crónicas (GNEAUPP) y la Asociación de Enfermería Comunitaria (AEC) organizan unas jornadas los días 22 y 23 de octubre en Alicante, en las que expertos nacionales e internacionales analizarán los modelos actuales de Enfermería y cuál debe ser la evolución de los mismos para que la enfermera pueda asumir su papel en el desarrollo y la sostenibilidad del sistema.
No cabe la menor duda que la enfermera se posiciona como un actor preparado y con la suficiente determinación para aprovechar esta nueva oportunidad, la cual le permitirá acceder a nuevas dimensiones de la asistencia que hoy en día están surgiendo. La aparición de nuevos roles y competencias hacen necesario que seamos capaces darles valor de cara a la sociedad como un producto innovador, sostenible, humano y al alcance de todos.
La gestión de casos y el desarrollo de un marco formativo cada vez más especializado definen nuevas competencias que repercuten positivamente tanto económicamente como en la eficiencia y calidad de la atención prestada.