17/09/2008

El CECOVA recomienda acomodar el peso de las mochilas a las características de los escolares para evitar lesiones musculares

El Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (CECOVA) recomendó hoy, ante el inicio del curso escolar, que “se acomode el peso de las mochilas a las características físicas del alumnado para evitar la aparición de lesiones musculares por la sobrecarga que pueden derivar en patologías degenerativas o crónicas en edad adulta”. Además, los escolares deben “tomar un buen desayuno para un rendimiento escolar óptimo, ya que el 8% de los escolares acuden al colegio sin haber desayunado y sólo el 26% realiza un desayuno completo”.

La enfermera María del Mar Ortiz, coordinadora del grupo de trabajo de Enfermería en Salud Escolar (ENSE) en Alicante, advirtió de que el peso de las mochilas debe “adaptarse a la edad y el tamaño del niño” y, por ello, es desaconsejable usar las mismas mochilas durante varios años. En caso contrario, advirtió de que los menores “pueden sufrir problemas musculares o sobrecargas” y, en este sentido, recordó que “hay un 60% de niños en edad escolar que tiene en algún momento dolor de espalda debido, entre otros factores, al excesivo peso de las mochilas”. Las mochilas no deben sobrepasar en ningún caso un peso superior al 10% o 15% de su peso corporal, según los profesionales del CECOVA.

Las enfermeras escolares del CECOVA recomiendan por ello que los escolares no transporten en sus mochilas material escolar que sobrepase en un 10% o 15% su peso corporal y que se coloquen estas bolsas “de manera correcta, en la parte alta de la espalda”. Así, indican que “es aconsejable que las mochilas estén almohadilladas y colocadas sobre ambos hombros, y no sólo en uno, y apoyada en la zona dorsal, con los tirantes no excesivamente largos”. En caso contrario, “llevar la mochila aumentaría la carga lumbar y se sobrecargaría la zona”.

RECOMENDACIONES PARA LA VUELTA AL COLE

Asimismo, para afrontar con energía la vuelta al cole, las enfermeras escolares recomiendan “tomar un buen desayuno para un rendimiento escolar óptimo, ya que el 8% de los escolares acuden al colegio sin haber desayunado y sólo el 26% realiza un desayuno completo”. Los niños que van a la escuela sin desayunar “tienen una disminución de su capacidad física, de su resistencia al esfuerzo, de su fuerza muscular y de su capacidad de aprendizaje, lo que da como resultado menor concentración y rendimiento escolar”.

Las enfermeras escolares recuerdan que “cada vez hay más casos de obesidad en los niños que toman un desayuno escaso o no desayunan”. En la Comunidad Valenciana, un 25% de los niños tienen sobrepeso y otro 15% son obesos. Por todo ello, advierten de que el desayuno “es la comida más importante del día, debe aportar el 25% de las necesidades calóricas diarias y debe estar compuesto por un lácteo, cereales en alguna de sus formas (pan, galletas, cereales de desayuno) y fruta”.

SERVICIO DE ENFERMERÍA ESCOLAR

Finalmente, Mar Ortiz recomendó la puesta en marcha del Servicio de Enfermería Escolar en todos los centros de Educación Especial tal y como establece la Ley 8/2008, de 20 de junio, de los derechos de salud de niños y adolescentes aprobada antes del verano por las Cortes, ya que “los alumnos de estos colegios son niños y niñas con traqueotomías y respiradores, que sufren crisis convulsivas relacionadas con su patología y deben ser atendidos inmediatamente, alumnos con sondas nasogásticas y vesicales, que requieren una supervisión y unos cuidados continuos que no están recibiendo”. Además, según Ortiz, “en muchos casos este tipo de alumnado también debe tomar medicación, que tiene que ser supervisada y cuidadosamente administrada por profesionales sanitarios y, en la actualidad, en algunos casos está siendo administrada por educadores y profesores”.

Así, Ortiz recomienda implantar la Enfermería Escolar en todos los centros educativos pues “cada vez se escolariza más alumnado con problemas crónicos de salud y alergias que requieren una atención y administración de medicación que actualmente no están recibiendo”; y, por otro lado, estas enfermeras también fomentan unos hábitos de vida saludables a través de programas de Educación para la Salud, como una alimentación saludable, higiene y ergonomía correctas, prevención de trastornos de la conducta alimentaria, de consumo-abuso de drogas o de problemas relacionados con la afectivo-sexualidad, entre otros.

Notas de Prensa