ASIER SÁEZ-CIRIÓN, INVESTIGADOR DEL VIH EN EL INSTITUTO PASTEUR: «Es posible eliminar el virus del sida»
FERMÍN APEZTEGUIA Asier Sáez Cirión (Bilbao, 1975) trabaja como investigador en el Instituto Pasteur de París junto a Francoise Barré-Sinoussi, la última Nobel de Medicina, que compartió reconocimiento con Luc Montagnier y el profesor alemán Harald zur Hausen. El joven científico, formado en la Facultad de Ciencia y Tecnología de la Universidad del País Vasco, busca desde hace años la manera de acorralar el virus del sida. La ciencia, según dice, está todavía lejos de dar con una vacuna preventiva, pero la reciente 'curación' de un paciente alemán gracias a un trasplante de médula abre «nuevas esperanzas» en la lucha contra el virus.
-¿Qué hace un español en el laboratorio de Barré-Sinoussi?-Intento llevar a cabo una investigación que me resulta muy interesante en uno de los sitios de mayor prestigio del mundo.
-¿Por qué eligió el virus del sida para investigar?
-Desde que estudiaba Biología me intrigaron mucho los virus, cosas tan pequeñas con tantos recursos, capaces de crearnos tantas complicaciones. El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es el mayor problema de salud al que se enfrenta la Humanidad. Quise aportar lo que pudiera.
-¿Qué busca?
-Estamos estudiando los mecanismos naturales de control de la infección. Cuando llegué al Instituto Pasteur mi idea era estudiar a las personas expuestas que nunca llegan a infectarse. Mientras hacíamos este trabajo, nos surgió la posibilidad de estudiar a otros sujetos raros.
-¿Cómo de raros?
-Personas infectadas que han sido capaces de controlar espontáneamente la infección. Nuestro objetivo es tratar de comprender cómo se produce ese control espontáneo.
-¿Por qué es tan importante saber algo así?
-Nos permitiría conocer hasta dónde podemos llegar con una vacuna o una nueva terapia. Pero para eso tenemos que comprender muy muy bien cómo estas personas han llegado a controlar el virus sin fármacos, algunos de ellos desde hace más de 20 años.
Vivir sin medicación
-Entre un 1% y un 3% de los europeos está protegido naturalmente frente a la mayoría de los tipos de VIH. ¿Habla usted de esto?
-Ese era nuestro primer grupo de estudio. Entre los europeos hay quienes tienen una mutación genética que impide al virus entrar en las células que invade. Se exponen al VIH, pero no lo contraen. El segundo grupo del que le hablo está compuesto por otros casos raros, por personas que están infectadas y al mismo tiempo protegidas. Son pocos, menos del 0,06% de la población afectada.
-¿Viven con el virus del sida sin que les pase absolutamente nada?
-Sí, así es.
-Hace dos años oí a su 'jefa' decir en Toronto que faltan cien años para la vacuna. ¿Lo cree así?
-No soy tan drástico como ella, pero sí; estamos muy lejos. No sabemos cómo hacerlo. Sin embargo, comenzamos a saber un poco más sobre cómo podríamos mitigar la infección.
-¿Entonces, buenas noticias!
-Ciertas personas y determinados monos nos están enseñando que conviven perfectamente con el virus. Disfrutan de mecanismos naturales que les permiten controlar la infección. Eso nos ayudará a desarrollar nuevas terapias, incluso vacunas terapéuticas.
-...Vacunas que no protegen, pero sí permitirían al paciente infectado prescindir de la medicación por un tiempo.
-Nos ayudarían a disminuir la cantidad de virus en la sangre y permitirían una vida más o menos normal sin necesidad de una terapia muy eficaz, pero pesada y que tiene efectos secundarios.
-Siempre se dice que la vacuna es difícil porque el virus muta mucho. Pero también lo hace el de la gripe y existe cada año una nueva.
-El americano Ronald Desrosiers, profesor de Microbiología en la Universidad de Harvard, es una persona muy implicada en la investigación de la vacuna del VIH. En la última conferencia sobre retrovirus de Boston, mostró al público una diapositiva comparativa sobre la variación del virus de la gripe y el del VIH...
-¿...Y qué se veía?
-...En un individuo podemos encontrar diez veces más variables de VIH que todas las que ha habido de gripe a lo largo de la historia. Aparte, hay otros problemas que lo complican, como que el VIH ataque justo a las células del sistema inmune.
-Los antibióticos se descubrieron por casualidad. ¿Ocurrirá lo mismo con la vacuna del VIH?
-¿Quién sabe! Recientemente ha habido una aproximación muy interesante por un médico alemán. ¿La conoce?
-Era mi siguiente pregunta...
-Bueno, pues ya sabe: había un paciente que necesitaba un trasplante de médula y buscaron un donante que tuviese esa mutación, que sabemos que bloquea la mayor parte de los virus circulantes. La técnica que han utilizado no pueda aplicarse a todo el mundo, pero es importante porque nos permitirá entender mejor qué sucede.
-¿Cómo debe entenderse entonces este avance?
-Creo que se ha hecho un buen trabajo y que los resultados son esperanzadores. Por primera vez, se va más allá del control del virus en sangre y no se encuentra ninguna traza de él. Eso significa que es posible eliminarlo, cosa que hasta ahora ignorábamos. No teníamos ninguna evidencia de ello.
-¿Lo cree posible?
-Si los datos se confirman, siempre con cautela, eso podría indicar que podríamos eliminarlo o, al menos, controlarlo a niveles espectaculares.
Crece la epidemia
-¿Hasta qué punto el sida es un problema de salud en Occidente?
-Lo es, porque cada año aparecen miles de nuevos casos en cada país. Hay que tener mucha precaución. Los medicamentos prolongan la vida espectacularmente, pero no podemos permitir que la gente se relaje.
-Con 35 millones de afectados, ¿será posible parar la epidemia aunque se disponga de una vacuna?
-Esperemos que sí. Se están haciendo progresos muy importantes para hacer llegar medicamentos a los países pobres y hay un verdadero compromiso en ese objetivo. Si finalmente se dispone de una vacuna, el camino estará abierto.
-¿En que contribuiría a la lucha contra el sida un cambio de doctrina en la Iglesia?
-Es sida es una infección que puede evitarse con una buena prevención. La prevención a nivel sexual pasa por el uso del preservativo. Evidentemente, un espíritu más abierto por parte de la Iglesia sería muy bienvenido en los países africanos donde la Iglesia tiene una influencia muy importante.
Fuente: Diario Ideal.es
http://www.ideal.es/granada/20081201/sociedad/posible-eliminar-virus-sida-20081201.html Notas de Prensa