La falta de consideración se lleva incluso a nivel consultivo al no recurrir a Enfermería ante la intención de devolver la asistencia sanitaria a 30.000 inmigrantes

Los nombramientos para ocupar las diferentes direcciones generales de la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública de la Comunidad Valenciana evidencian el olvido y ninguneo de nuestros dirigentes políticos hacia la profesión de Enfermería. Ni uno solo de estos cargos está ocupado por una enfermera, obviando así al colectivo profesional más numeroso de la sanidad autonómica y con el que todos los políticos se llenan la boca anunciándole protagonismo futuro por el envejecimiento de la población y aumento de una cronicidad que requerirá más profesionales de los cuidados pero que, por el contrario, no se acaba de tener en cuenta.

Desde el Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (CECOVA) y desde los colegios de Alicante, Castellón y Valencia que lo integran asistimos atónitos al hecho de que no se cuente con las enfermeras de acuerdo a su preparación, peso específico dentro del sistema y protagonismo en el mismo y nos cuesta mucho creer que ni una sola enfermera reúna las cualidades suficientes como para ser merecedora de una dirección general en nuestra Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública, universalidad que aún no llega a los profesionales de Enfermería.

No alcanzamos a entender cómo la formación en Gestión y Administración recibida en nuestra etapa universitaria y una gran experiencia en el terreno práctico del día a día de la sanidad autonómica no son tenidas en cuenta a la hora de tomar estas decisiones. Y más si se contempla la trayectoria de la nueva consellera en el plano de la igualdad, una igualdad que, igual que la universalidad, tampoco llega a nuestras enfermeras.

Vemos cómo en otras comunidades autónomas se nombra a enfermeras como conselleras de Sanidad mientras aquí vamos a peor.

Esperemos que este ninguneo hacia nuestra profesión no tenga relación con la escasa experiencia de la nueva consellera en el ejercicio de la Medicina, pero si es por ese motivo le recordamos que ante la nueva realidad sociosanitaria generada por el envejecimiento poblacional y el incremento de los pacientes con enfermedades crónicas está cambiando el paradigma del curar por el del cuidar, lo cual implica necesariamente contar con enfermeras al frente de las políticas sanitarias para afrontar esta situación. Creemos que no puede estar de más recordarlo.

La Comunidad Valenciana estaba especialmente indicada para reconocer a la profesión de Enfermería su aportación al sistema sanitario. El cambio de paradigma asistencial hacia el cuidar, donde Enfermería cobra máximo protagonismo, debe acompañarse de un cambio del paradigma gestor que ha predominado hasta la fecha.

Las enfermeras deben tener, por justicia sanitaria, la oportunidad de la toma de decisiones al más alto nivel en cuestiones relacionadas con la salud de la población y calidad asistencial. Deben liderar proyectos y planes estratégicos dentro del campo de la sanidad autonómica. Pueden ofrecer una visión diferente sobre la forma de gestionar el binomio salud-enfermedad, adecuando de forma efectiva y eficiente los recursos destinados a tal fin.

Pero por desgracia los ejemplos del ninguneo hacia nuestra profesión se multiplican y se van sumando a los argumentos a utilizar para valorar los primeros cien días de Carmen Montón al frente de Sanidad. Otro de ellos es el anuncio hecho por Montón de incorporar los cambios necesarios para ampliar la asistencia sanitaria en la Comunidad Valenciana a unos 30.000 potenciales beneficiarios, para lo que se trabaja con la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria y Médicos del Mundo, según indicó. Ante ello no sabemos si el que no se cuente con ninguna sociedad científica de Enfermería, como la Asociación de Enfermería Comunitaria, se debe a desconocimiento o a falta de consideración hacia nuestra profesión, pero sea lo que sea el ninguneo ya está hecho.

La semana pasada reclamaba el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, con respecto a la financiación autonómica, que nuestra comunidad autónoma no puede seguir siendo invisible al Gobierno central. Nosotros, desde Enfermería, hacemos extensivo ese planteamiento al sector sanitario autonómico y decimos que nuestra profesión no puede ser invisible para nuestros responsables sanitarios.

Desde la Organización Colegial de Enfermería de la Comunidad Valenciana esperamos no tener el mismo tratamiento en aquellas reivindicaciones que podamos plantear a los nuevos responsables sanitarios de la Comunidad Valenciana.

Puede acceder a la nota de prensa emitida por la Asociación de Enfermería Comunitaria (AEC) a través del siguiente enlace o descargando el fichero adjunto:

Nota de prensa de la Asociación de Enfermería Comunitaria (AEC)